El
pasado 25 de enero, con motivo del Día de la Educación Ambiental, los cursos 3º
y 4º de primaria participaron en una actividad que tenía como objetivo que el
alumnado tomara conciencia de la importancia de proteger el medio ambiente.
La
actividad comenzó sobre las 9,20 h. de
la mañana cuando ya esperaban a los niños en el pabellón de deportes los
monitores, alumnos del Centro de Capacitación de Vadillo-Castril, con gorras de
colores y medallas de pino para diferenciar los grupos.
Posteriormente
acudieron al talud del hospital acompañados por la Policía Local y allí
comenzaron las actividades: charla previa sobre la importancia del medio
ambiente, reforestación con plantas autóctonas (quejigos, encinas, pinos
carrascos, lentiscos, romeros…), desayuno saludable, realización de bombas de
semillas utilizando la técnica “nendo dango” y que los niños lanzaron al final
de la jornada, además de conocer el funcionamiento de un camión utilizado por
el INFOCA para apagar incendios forestales.
Esta
actividad ha sido una iniciativa de los propios centros escolares de la
localidad que están adscritos al programa ALDEA de Educación Ambiental y ha contado
con la participación de 250 personas de cuatro centros educativos de la
localidad.
Desde
el CEIP Virgen de la Cabeza queremos dar las gracias al Ayuntamiento de Cazorla
por su colaboración, así como a los alumnos y profesores del Centro de
Capacitación y Experimentación Forestal de Vadillo-Castril por guiarnos y
enseñarnos tantas cosas, a la Delegación de Medio Ambiente por facilitarnos
todo lo necesario para la actividad, a los encargados de mostrarnos cómo
funciona un camión de bomberos, a la Policía Local por cuidarnos… en definitiva, a todo el que ha hecho posible
esta actividad.
En
el centro se han realizado otras actividades con motivo del Día de la Educación
Ambiental como la creación de máscaras de lince ibérico y marionetas de aves,
actividades sobre apicultura y dinámicas sobre el problema del cambio
climático.
Desde
el CEIP Virgen de la Cabeza pensamos que este tipo de actividades desarrolladas
en el propio medio nos ayuda a conocerlo y vivenciarlo, y de esta manera, a
valorarlo y protegerlo.